martes, 8 de abril de 2014

AMBIENTADOR CASERO

                    Dos ideas paso a paso para tu hogar
Mantener nuestro hogar libre de malos olores es una parte esencial de la limpieza de nuestra casa que no debemos olvidar. El mercado ofrece miles de posibilidades con todo tipo de aromas pero ¿por qué no hacerlos nosotros mismos?
Con unos materiales muy económicos y que solemos tener siempre en casa, podemos crear en menos de dos minutos un ambientador casero con nuestro aroma favorito. También, si fumáis en casa, os damos una buenísima idea para atenuar el olor del tabaco


Preparar un ambientador casero totalemente ecológico y muy económico es muy sencillo:

  Materiales: 

- Agua
- Dos cucharaditas de bicarbonato sódico
- Esencia del aroma que más nos guste
- Un pulverizador 


  Elaboración:

- Lo primero que vamos a hacer es añadir el bicarbonato sódico al agua, aproximadamente 2 cucharadas para medio litro.

- Removemos bien para que no quede ningún tipo de grumo, para que así cuando pulvericemos, no salga ninguna sustancia sólida. 

- Despues, añadiremos la esencia. La cantidad va al gusto, si queremos conseguir un olor fuerte pondremos más, y si sólo deseamos un toque sutil, añadiremos unas gotitas. Volvemos a remover hast que se mezcle bien todo. 

- Por último, ya sólo nos queda verter bien todo el contenido dentro del pulverizador, y de este modo tan sencillo, tenemos listo nuestro ambientador casero y ecológico.

Este tipo de ambientador sirve para absorver y eliminar de nuestro hogar el olor del tabaco. Toma buena nota:


  Materiales: 

- 3  limón
- Esponjas
- Un cuenco o recipiente
- Agua

  Elaboración:

- Lo primero que vamos a hacer, es trocear las esponjas (en este caso de tres colores), para luego componer con ellas.

- Una vez que tenemos los trozos cortados, los vamos a ir mezclando con el jugo del limón, que podremos rebajar un poquito con agua según la intensidad del mismo. Vamos empapando cada pedazo de manera que no gotee y los dejaremos sobre el recipiente.

- Jugaremos un poquito con los colores para que quede lo más decorativo posible. La porosidad de la esponja es la que va a atrapar el olor del humo del tabaco. Al llevar limón, vamos a conseguir un efecto también de ambientador de una manera totalmente ecológica. 


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