La primaria o tipo menor:
La palma es espesa
y gruesa con dedos cortos y torpes, y las uñas cortas. Aquí, la palma
domina la mano, es decir, la naturaleza animal prevalece. Este tipo de
personas poseen poca capacidad mental y tienen una fuerte influencia
directa hacia un final bruto. Violentos y apasionados en la vida pero su instinto cobarde impide que tomen riesgos.
La mano cuadrada o de utilidad:
La palma es cuadrada desde la muñeca, cuadrada en la base de los dedos y los dedos de forma cuadrada. Estas personas son puntuales, ordenadas y precisas, con gran sentido de la disciplina. Prefieren la razón al instinto, la paz a la guerra y son muy metódicos en el trabajo y sus hábitos. No se adaptan a las personas, a las nuevas ideas o no tienen ningún interés en el trabajo creativo o el arte. No creen que lo puedan comprender.
La espátula o de tipo activo-nervioso:
Inusualmente
amplio en la muñeca o en la base de los dedos, con la punta de cada
dedo semejante a una espátula. Son inquietos y excitables y nunca se
adhieren a algo por mucho tiempo. Son amantes de la acción, la energía y la independencia. Estas manos son típicas de grandes ingenieros, explorados, científicos, navegantes y mecánicos, pero no siempre. Poseen una forma original de la percepción y una singular independencia de su espíritu.
La filosófica o mano nudosa:
La mano es larga y angulosa, con dedos huesudos, articulaciones desarrolladas y uñas largas.
Son amantes de la humanidad y son muy diferentes a la multitud.
Silenciosos y reservados, pensadores profundos y cuidan muchos los
asuntos pequeños. Están orgullosos de ser diferentes, y rara vez se
olvidan de algún fallo. Brahmanes, yoguis y otras personas místicas como los jesuitas de la iglesia católica, poseen a menudo estas manos.
La cónica o artística:
Es una mano de tamaño medio, con la palma ligeramente cónica y dedos completos
en la base o ligeramente puntiagudos. Los principales rasgos de esta
mano son el impulso y el instinto, aquel en el que predominan el amor
por el lujo y la indolencia. Aunque son rápidos en pensamientos e ideas,
carecen de paciencia y se cansan fácilmente. Ellos no razones, juzgan
por el impulso y el instinto y son buenos conversadores. Poseen un
temperamento generoso, simpático y emocional.
La psíquica o mano idealista:
La mano más bella, aunque la más desgraciada de los siete tipos, debido a que es estrecha y de aspecto frágil, con dedos delgados y uñas con forma de almendra. Tienen una visión pura y una naturaleza idealista,
aunque no tienen ni idea de ser lógicos o prácticos. Son fácilmente
influenciables y parecen habitar en los confines de la espiritualidad,
sin saber por qué. En el sentido mundano, se suelen quedar los últimos de la carrera, perdidos por la fama y la fortuna.
La mano mixta:
La mano
mixta se llama así porque no puede ser catalogada en ninguno de los
tipos anteriores. Los dedos también pertenecen a distintos tipos. Esta
es la mano de las ideas, la versatilidad y generalmente la mutabilidad
de propósito. Se adaptan a las personas y circunstancias. Inteligentes,
pero erráticos en la aplicación de talentos. Encuentran su mayor
alcance en el trabajo de la diplomacia y el tacto. Por lo general, se convierten en el “hombre orquesta” y no pueden poseer desarrollo puro.
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